Homecoming 3/24

I remember the first night I slept in my freshman college dorm room, after our first day of college orientation. Most of my belongings were unpacked, my roommate had gone out to a party, and I laid alone in my bed, my family nine hours away from me. I was completely alone for the first time in my life, and the silence was deafening. Scared, overwhelmed, lonely, I cried myself to sleep that first night. Often, I wonder if the Israelites felt similarly when they were in a new land, their nation divided, their god nowhere to be seen.

The Israelites were promised a land to which they could belong, with one shepherd, and an everlasting covenant of peace. God makes that same promise to us today. Even when we feel alone and scared, we have a universal community with one shepherd. God dwells with us forever, and we are his people. “I will give them gladness and joy.” (Jeremiah 31:13) The Lord guards us, as a shepherd guards his flock.

In moments of desolation and loneliness, how can you more fully rely on our faith community and our Shepherd? Remain in me, Lord, and I in You.

--Amanda Jewett

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Regreso A Casa 3/24

Recuerdo el primer día de orientación del colegio y la primera noche que dormí en mi habitación de Universidad. La mayoría de mis pertenencias estaban desempacadas, mi compañero de cuarto había salido a una fiesta, y yo solo acostado en mi cama, mi familia a nueve horas de mí. Estaba completamente solo por primera vez en mi vida, y el silencio era ensordecedor. Asustado, abrumado, solitario, lloré hasta que me dormí esa primera noche. A menudo, me pregunto si los israelitas sintieron lo mismo cuando estaban en otras tierras, su nación dividida, su dios por ningún lado.

A los israelitas se les prometió una tierra que les pertenecería, con un solo pastor y un pacto eterno de paz. Dios hoy nos hace esa misma promesa a nosotros. Incluso cuando nos sentimos solos y asustados, tenemos una comunidad universal con un pastor. Dios está con nosotros para siempre, y somos su pueblo. "Les daré gozo y alegría." (Jeremías 31:13) El Señor nos protege como un pastor cuida a su rebaño.

En los momentos de desolación y soledad, ¿cómo podemos nosotros más plenamente confiar en nuestra comunidad de fe y nuestro Pastor? Permanece en mí, Señor y yo en ti.

--Amanda Jewett